EL DESTINO LO QUISO ASÍ..!

Noche fría y despejada de agosto, todo parece tranquilo y normal en la casa de los Monserrat. Pero en el garage todo es distinto, el Renault 19 blanco pierde gas del tubo amarillo que se encuentra en el baúl. La incesante pérdida llega hasta el termotanque que está encendido en el fondo de la cochera.
Los Monserrat perciben un olor no convencional y desagradable, entonces el jefe de familia se dirige hacia el sector del garage y enciende la luz, en este momento se desata la tragedia, el tubo de gas explota y causa densas columnas de fuego. El potente ruido que origina la explosión causa estupor a los vecinos, que se acercan lentamente a brindar ayuda a la familia, otros corren y algunos con sus celulares llaman a los Bomberos.
Mientras tanto el panorama es estremecedor.
La casa se encuentra invadida por las llamas de un metro y medio de altura, olor a humo penetrante y el coche totalmente incinerado junto a una Honda Biz de color azul que se encuentra junto al auto.
En estos momentos están llegando los bomberos con dos autobombas y las sirenas encendidas para que los vecinos y curiosos abran paso y se pueda llegar a combatir el incendio.
En la calle en donde se encuentra emplazada la vivienda está invadida de gente, los perros que ladran y la familia Monserrat consternada frente a esta terrible situación.
Mientras camino por esa cuadra observo que las casas contiguas a la vivienda incendiada han sufrido caída de mampostería, los puertas están hundidas , vidrios de ventanas rotos debido a la magnitud de la explosión.
El frente de la casa está irreconocible, la cocina destruida y uno de los dormitorios se le ha derrumbado la pared.
El más dañado es Joaquín , uno de los integrantes de la familia que tiene afectadas las vías respiratorias y el 50 % del cuerpo quemado.
El que no se salvo tampoco es ``sabina ´´ , el perrito de la familia que es alcanzado por las llamas, por lo que se le chamuscó su pelaje blanco.
Ahora sigo caminando lentamente y observo la mirada perdida y los rostros apenados de los Monserrat , que todavía les persiste el horror tras la estremecedora escena de ver entre las llamas anaranjadas todo lo que han conseguido con trabajo y sacrificio y que en un abrir y cerrar de ojos todo se vea en un montaña de cenizas .